domingo, enero 20, 2019

Caigo. Caigo hondo y en picada a ese pozo que me quedó en el pecho desde la ultima vez que te vi. 
Me absorbe como si fuera un agujero negro empeñado en hacer desaparecer a la persona en la que me convertí sin vos.
En la oscuridad intento salir de adentro de mi misma. 
No puedo. 
Y es ahí, en esa lucha por mantenerme en pie donde aparecen tus ojos mirándome y pidiéndome que vuelva a intentarlo una vez más. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario