que no vas a ocupar nunca ese lugar que espero,
y vaya uno a saber por qué
sigo soñando a veces con los besos que nunca voy a darte
y me entretengo jugando a las escondidas con tus fotos,
esas que trato de no ver nunca
para no ver de frente que tengo que dejarte ir,
pero cómo te cuento todo esto
si no puedo ni mirarte
ni pedirte que te quedes un rato mas conmigo
haciendo de cuenta que puedo manejar las cosas
cuando claramente no puedo,
o no quiero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario