•ka hala maikaʻiʻole•
Viniste a despertarme.
Me decías que estábamos llegando tarde pero que todavía teníamos tiempo de desayunar.
Tarde. A dónde, no sé. A la vida del otro, capaz.
Qué picardía la del destino, de separarnos tanto para juntarnos así.
No hay comentarios:
Publicar un comentario